El Corona Capital 2024 no fue solo un festival; fue una experiencia que marcó un antes y un después en la historia musical de México. El Autódromo Hermanos Rodríguez se convirtió en el epicentro de emociones y recuerdos durante tres días intensos, donde miles de asistentes vivieron momentos épicos de la mano de artistas legendarios e íconos actuales. Desde la nostalgia de New Order, la energía desbordante de Green Day, el encanto pop de Shawn Mendes, hasta el cierre monumental con Paul McCartney, este festival consolidó su lugar como el evento musical más importante del país.
El inicio de un viaje emocional
El CC fue un festín para los amantes del rock alternativo y la electrónica. La llegada de New Order al escenario principal fue como un viaje en el tiempo. Con éxitos como "Blue Monday" y "Bizarre Love Triangle", la banda británica nos transportó a la década de los ochenta, llenando el aire de melancolía y ritmos irresistibles. El público, un mar de luces y voces, no dejó de cantar ni un segundo. Bernard Sumner, visiblemente conmovido, expresó: “México siempre será especial para nosotros”.
Los escenarios secundarios vibraron con propuestas frescas y emocionantes, desde el indie hasta el post-punk, pero fue New Order quien marcó la pauta de lo que sería un fin de semana inolvidable.
La energía al máximo
En el CC subió la temperatura, y Green Day fue el encargado de encender la chispa que hizo estallar el festival. Desde el primer acorde de "American Idiot", el público estalló en un frenesí de brincos y gritos. Billie Joe Armstrong, en su característico estilo irreverente, no paró de interactuar con la audiencia. En un momento inolvidable, invitó a un joven fanático al escenario para tocar la guitarra durante "Basket Case". La energía punk rock del trío estadounidense hizo temblar al Autódromo.
Antes de ellos, el carisma de Shawn Mendes había conquistado a miles. Con una presentación llena de sensibilidad y conexión emocional, temas como "In My Blood" y "Treat You Better" se convirtieron en himnos que unieron generaciones. Su habilidad para conectar con el público quedó clara cuando, guitarra en mano, dedicó una versión acústica de "Fallin’ All in You" al público mexicano.
El cierre: un final para la historia
El cierre del Corona Capital 2024 fue simplemente inolvidable. La emoción estaba en el aire cuando Paul McCartney, una de las leyendas vivas más grandes de la música, tomó el escenario. Desde el primer acorde de "A Hard Day’s Night", la multitud supo que estaba presenciando algo único.
McCartney ofreció un setlist impecable que incluyó clásicos de The Beatles, canciones de Wings y éxitos de su carrera en solitario. La energía del público alcanzó su punto máximo con "Hey Jude", cuando miles de voces unieron sus corazones en un coro universal. Con cada canción, Paul demostró que, a sus 82 años, sigue siendo un maestro en su arte, conectando con nuevas generaciones y recordando por qué es un ícono eterno.
El espectáculo culminó con "Live and Let Die", acompañado de fuegos artificiales que iluminaron el cielo de la Ciudad de México, y una emotiva interpretación de "Golden Slumbers". Fue un cierre que quedará grabado en la memoria de todos los asistentes.
Más que un festival: una experiencia inolvidable
El Corona Capital 2024 no solo fue un desfile de grandes artistas, sino una experiencia multisensorial. Desde la impecable organización hasta la diversidad de propuestas gastronómicas y áreas recreativas, cada detalle estaba pensado para ofrecer lo mejor a los asistentes. Los momentos espontáneos, como fans que se conocieron en las filas o improvisadas coreografías grupales, añadieron un toque humano y único al evento.
El festival demostró, una vez más, que la música tiene el poder de unir generaciones, trascender fronteras y crear recuerdos imborrables. Desde las lágrimas derramadas durante los momentos más nostálgicos hasta la euforia colectiva que resonó en cada rincón del Autódromo, el Corona Capital 2024 fue más que un festival: fue el alma de la música hecha realidad.
¡Nos vemos el próximo año, Corona Capital!
Texto Mariana Núñez
Fotografías Karim Romero