
Enrique Bunbury desata un huracán emocional en Querétaro
- Mariana Nuñez
- 8 jun
- 2 Min. de lectura
Querétaro, 8 de junio de 2025 — Hay noches que simplemente quedan tatuadas en el corazón, y lo vivido hoy en el Autódromo de Querétaro con el regreso de Enrique Bunbury fue una de esas experiencias mágicas, inolvidables, de esas que se cuentan una y otra vez.

El tour “Huracán Ambulante” hizo su debut en tierras queretanas con una potencia emocional y artística que nos dejó sin aliento. Desde que se apagaron las luces y comenzaron a sonar los primeros acordes, la atmósfera se transformó en algo casi sagrado. El escenario —sobrio, elegante y con una escenografía envolvente— fue perfecto para un ritual que nos conectó con lo más profundo de nuestras memorias musicales.

La iluminación fue simplemente espectacular: cada tema tenía su propio universo visual, cada foco parecía danzar al compás de las emociones. En cada destello, la nostalgia se mezclaba con la adrenalina de ver de nuevo al maestro sobre el escenario. Y su voz Impecable, nítida, potente. Cada palabra, cada susurro y cada nota nos llegaban al centro del pecho con una claridad que pocas veces se experimenta en vivo.
Bunbury salió con una fuerza renovada, con esa mezcla de misticismo y elegancia que lo ha hecho eterno. Su voz, intacta, desgarradora y cálida, nos guio por un viaje sonoro. Se notaba que él también estaba disfrutando: su energía, sus gestos, su entrega total hicieron de esta primera fecha algo absolutamente especial.
La gente vivió el concierto con una mezcla perfecta de euforia y contemplación. No hubo empujones, no hubo prisas. Todo el público parecía saber que estaba presenciando algo único. Había parejas abrazadas, amigos coreando a pulmón abierto, lágrimas discretas, sonrisas amplias. Una comunidad de corazones latiendo al ritmo del Huracán.

Esta noche en Querétaro fue mucho más que un concierto: fue una celebración de la vida, del amor por la música, y de la permanencia de un artista que ha sabido reinventarse sin perder su esencia.

Te invitamos a revivir esta velada mágica con nuestra fotogalería exclusiva, donde capturamos los momentos más intensos, los gestos más íntimos y el esplendor visual de un show que marcará un antes y un después en la memoria musical de la ciudad.
Fotos y cobertura: Mariana Núñez